Aunque todos sabemos los efectos negativos del alcohol y el malestar de la mañana siguiente, cuando se nos viene encima de nada nos sirve acordarnos, por ello vamos a dar una pautas para intentar minimizar el daño.
Antes de nada hemos de dar respuesta a la pregunta principal, ¿por qué nos sentimos tan mal después de haber cometido algunos excesos con el alcohol?
Se debe, principalmente, a los productos de desecho que se producen durante la metabolización del alcohol y que alteran ciertas funciones biológicas de nuestro organismo.
El alcohol provoca la inhibición de la vasopresina, hormona responsable de mantener el balance de líquidos en el cuerpo, dando lugar a la deshidratación y la sed tan característica que sentimos al día siguiente. También va a provocar la disminución de los azúcares presentes en la circulación sanguínea, va a disminuir los niveles de potasio y vitaminas del grupo B, como la B12, provocando nauseas, cefaleas y mareos.
A estas malas sensaciones podemos ponerles remedio desde nuestra despensa. El objetivo principal será reponer los líquidos así como incrementar el consumo de vitaminas y oligoelementos que nos ayudarán a reestructurar nuestro organismo.
Antes de comenzar a beber lo ideal es preparar al cuerpo para lo que se avecina…Llena el estómago, de este modo conseguirás enlentecer el vaciado gástrico y se producirá una menor elevación del alcohol en sangre, facilitando el trabajo a tu hígado. Por ejemplo: entre copa y copa una tapa de buen queso curado, excelente mezcla de proteínas y grasas saturadas.
En cuanto a la recomendación para el día de resaca propiamente dicho se basa en aumentar el consumo de los siguientes alimentos
FRUTAS Y VERDURAS
Zumo de naranja. Recién exprimido, es una rica fuente de vitamina C y fructosa, que ayudan al hígado a metabolizar el alcohol. Algunos azúcares disminuyen el proceso oxidativo del etanol en sus productos tóxicos ya que ocupa el espacio de metabolización del etanol en la liberación de los productos tóxicos. Además aumentan la velocidad de eliminación de alcohol en hígado ya que la vitamina C actúa como cofactor clave. Un ejemplo práctico: batido de naranja y pera con leche o fresas con yogur.
Plátano. Contiene potasio, que interviene en gran cantidad de funciones biológicas, vitaminas del grupo B, glucosa y fructosa que combaten el daño metabólico.
Alcachofas. Entre sus beneficios destaca su acción depurativa y de eliminación de sustancias de desecho del organismo siendo una excelente verdura para el hígado y para eliminar las grasas y el colesterol. Además contiene calcio, fósforo, potasio y otros minerales, y vitamina B1.
LÁCTEOS
Son fuente de cisteína y aminoácidos que ayudan a metabolizar el acetaldehído. No olvide incluir proteína de suero este día!
HUEVO
Es una importante fuente de cisteína, compuesto que ayuda a eliminar el acetaldehído de nuestro organismo. También contiene vitaminas del grupo B.
PESCADOS
Atún. Es una fuente natural de vitaminas del grupo B entre las que destacan B2, B3, B6, B9 y B12
Lo más destacado, beber mucha agua a ser posible carbonatada que acelera el metabolismo del etanol. Intercala alguna que otra infusión de té con jengibre que potencia la desintoxicación del organismo.
Y recuerda, al igual que la única prevención posible es la abstinencia, la única cura real es el tiempo.
Por Inés Martín Pilas
Especialista en Dietética y Nutrición